Llevamos justo un mes de confinamiento en casa, desde el día 14 de marzo, en el que se publicó el estado de alarma. Nos encontramos ante una situación nueva, y como sucede con todo lo desconocido, nos genera incertidumbre y, sobre todo, miedo. En especial, cuando sentimos amenazada nuestra salud y también la de nuestros seres queridos. Y por tanto, nuestro bienestar emocional se está viendo afectado.
Niños, niñas, jóvenes y adultos hemos tenido que cambiar nuestras rutinas, tanto de estudio y de teletrabajo, como de ocio y tiempo libre. Y fruto de ello, la gran mayoría estamos consumiendo muchos recursos tecnológicos para seguir las clases a distancia, aunque también habrá algunos otros que debido a la brecha digital, no puedan hacerlo de igual manera.
Como consecuencia de ello, es posible que estemos realizando un uso excesivo de pantallas, y en este contexto es fácil perder el control, sobre todo entre los menores, y esto les pueda afectar tanto a sus relaciones sociales, como a la capacidad de gestión emocional.
A partir de hoy iremos publicando algunas recomendaciones para hacer un uso saludable de los dispositivos móviles y de las redes sociales dirigidas a menores, familias y profesorado.
Deja una respuesta